Los nuevos activos se suman a los 2.280 kilómetros de líneas de transmisión que la empresa opera en distintos puntos del país, entre las regiones de Antofagasta y Los Lagos.
Pese a los daños ecológicos que causó el deslizamiento de residuos de hidrocarburo en algunos cuerpos de agua y potreros de Venustiano Carranza, tanto lugareños como autoridades han señalado que la paraestatal ha demorado mucho para responder por los hechos.