Petróleo
Shell aumenta su apuesta por México
La petrolera angloholandesa Shell aumentará 3.5 veces la inversión dispuesta para explorar en aguas profundas mexicanas, dentro del área PG06 que se adjudicó en la Ronda 2.4 donde además se comprometió a perforar el primer pozo de esta ronda, según aprobó la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).
En la 23 sesión extraordinaria del órgano de gobierno del regulador se aprobaron modificaciones al plan de exploración de Shell en el contrato de licencia R02-L04-APPG06-2018, con lo que de una inversión estimada de 90.6 millones de dólares propuestos hace un año, propuso invertir hasta 323.7 millones de dólares en el escenario incremental de sus actividades hasta el 2023.

La CNH aprobó que la petrolera incremente 3.5 veces la inversión dispuesta para explorar en aguas profundas mexicanas.
De esta inversión, 93% corresponderá a la perforación de pozos. Y es que en el plan de exploración original, Shell propuso distintas etapas de exploración superficial y adquisición de sísmica tridimensional –que ya ha realizado en la totalidad del área de 1,890 kilómetros cuadrados– pero además, planteó la perforación de dos pozos en 2021 y 2022.
En el nuevo plan, Shell añade un tercer pozo y adelanta las dos perforaciones ya aprobadas, explicó el director general de Dictámenes de Exploración, Rodrigo Hernández Ordoñez.
“Resulta muy interesante que con esto la empresa calendariza el primer pozo que se va a perforar en toda esta ronda de aguas profundas, lo que puede ampliar las expectativas de esta zona para la actividad petrolera nacional”, dijo Rogelio Hernández Cázarez, presidente de la CNH.

De una inversión estimada de 90.6 mdd propuestos hace un año, propuso invertir hasta 323.7 mdd hasta el 2023.
Así, en los próximos meses y antes de que concluya el 2020, en el área que se ubica a 155 kilómetros de Tampico, Tamaulipas, se presentará el plan para la perforación de la que Shell denominó Oportunidad C, a una profundidad de 4,000 metros, para buscar aceite ligero de entre 24 y 40 grados del American Petroleum Institute (API) en un volumen prospectivo de 175 millones de barriles de petróleo crudo equivalente, con una probabilidad de éxito comercial de 24 por ciento.
Además de adelantar un año la perforación de este pozo, también adelantará del 2022 al 2021 la perforación de la que denominó Oportunidad A en el área, donde espera el hallazgo de 1,363 millones de barriles de crudo equivalente como recursos prospectivos, con una probabilidad de éxito comercial de 15% a una profundidad de 6,500 metros.
Y dependiendo del éxito de estas dos perforaciones, Shell pidió también al regulador la posibilidad de perforar un pozo incluso más profundo, a 8,120 metros, donde tiene la expectativa de hallar hasta 222 millones de barriles de petróleo crudo equivalente con una probabilidad de éxito comercial de 15%, denominada Oportunidad B y que podría ser perforado a partir de 2023.

Propuso etapas de exploración superficial y adquisición de sísmica tridimensional, además, planteó la perforación de dos pozos en 2021 y 2022.
Shell es la compañía petrolera internacional con mayor superficie de exploración en México. Tiene 11 bloques adjudicados en un área de 20,766 kilómetros cuadrados con inversiones total comprometidas por 742 millones de dólares, además de la perforación de 13 pozos exploratorios.
Para estos trabajos, la empresa firmó en febrero pasado un contrato para el arrendamiento de la plataforma La Muralla IV, propiedad de Grupo R. Shell tiene además a su disposición el barco perforador Deepwater Thalassa.
También en febrero, la CNH aprobó a Shell la perforación de otro pozo exploratorio en aguas ultra profundas: Max-1EXP, en otra área de la Ronda 2.4, CS-G02, que fue el segundo pozo a perforar en aguas ultra profundas de la Cuenca Salina del Golfo de México, a una profundidad total de 7,480 metros en un tirante de agua de 2,511 metros. Antes de la contingencia, Shell contempló llegar hasta el abandono del pozo el 17 de junio del presente año, actividades que según la regulación de la CNH pudieron diferirse.
Petróleo
Pemex reconoce riesgos ante SEC en nuevo informe

Petróleos Mexicanos (Pemex) entregó su más reciente informe trimestral a la Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos (SEC). Su mensaje quizá peque de ser sincero, incluso incómodo: la petrolera enfrenta riesgos persistentes por robo de combustibles, vulnerabilidades internas, presiones financieras que no ceden y un panorama político que podría cambiar las reglas de juego en cualquier momento. Entonces, Pemex reconoce riesgos ante SEC en nuevo informe.
El documento, enviado el 12 de noviembre, reconoce que el robo de hidrocarburos —incluido el huachicol fiscal— sigue golpeando a la empresa con una fuerza que se mantiene en niveles críticos. Pinta la situación energética del país tal como es: difícil, entre fuego cruzado de grupos criminales, viejas prácticas internas que se niegan a morir y un mercado ilícito cada vez más sofisticado.
Pemex reconoce riesgos ante SEC en materia de seguridad
El informe describe cómo el robo, la desviación y la manipulación de combustibles continúan afectando a la red de oleoductos de la petrolera a pesar de los certeros golpes que ha recibido. La empresa detalla también incendios, explosiones, afectaciones ambientales y pérdidas humanas ocasionadas por estas actividades, que también representan una merma considerable de ingresos a pesar de las acciones correctivas que buscan recuperar la paraestatal del abandono en que estaba.
En sus párrafos más extensos, Pemex reconoce riesgos ante SEC vinculados a estas actividades y advierte que los resultados de las acciones coordinadas con el Gobierno Federal han logrado ciertas mejorar puntuales, pero que deben sostenerse para que se perciba la mejoría.
En 2024 se detectaron 11,774 tomas clandestinas. Un año antes, 14,890. La petrolera admite que algunos empleados o funcionarios podrían verse involucrados o percibirse como parte del mercado ilícito. La frase queda ahí, mostrando una sustancial mejoría pero que debe seguirse notando.
Un entorno delictivo que no se rinde
La empresa contextualiza el fenómeno dentro de un país que ha experimentado experimenta“mayor actividad delictiva” en los últimos años, derivada de cárteles y organizaciones vinculadas al narcotráfico. La presencia de un mercado ilegal de combustibles añade otra capa al problema: interrumpe operaciones, compromete la seguridad del personal y amenaza la logística. La actividad delictiva es prevalente, persistente y podría agravarse si los esfuerzos se suspenden.
Reformas constitucionales y su impacto
Pemex advierte que la capacidad del Congreso para modificar la Constitución podría traducirse en cambios profundos en la política energética y en su operación diaria. Señala que la concentración del poder político podría tener consecuencias adversas para sus finanzas, su capacidad operativa y su manejo de deuda.
Además, expresa preocupación por eventuales modificaciones al régimen cambiario. Aunque el Gobierno de México no impone actualmente restricciones, la empresa recuerda que en el pasado sí existieron controles y que cualquier regreso a ese esquema dificultaría el pago de deuda denominada en moneda extranjera.
Presión financiera constante
La deuda sigue siendo la piedra más pesada en los hombros de Pemex. Con 100.3 mil millones de dólares al cierre de septiembre de 2025, más líneas de crédito abiertas y un calendario exigente de vencimientos, la empresa admite que su operación depende en gran medida del financiamiento y del apoyo gubernamental.
Describe un flujo operativo insuficiente para cubrir inversiones y gastos, lo que ha obligado a recurrir a financiamientos adicionales y medidas de eficiencia. Incluso con apoyo fiscal y recompras de bonos, el margen de maniobra sigue siendo estrecho.
Resultados operativos en medio de la presión
La petrolera presume resiliencia en producción y refinación, pero reconoce que los precios internacionales del crudo y el declive natural de varios campos complican el panorama. La producción de líquidos llegó a 1.65 millones de barriles diarios; la de gas natural, a 3,730 millones de pies cúbicos diarios, gracias en parte al empuje del campo Ixachi.
En ingresos, la empresa registró una disminución anual de 11.1%, derivada de menores exportaciones y precios bajos del crudo. Aun así, hubo una mejora de casi 100 mil millones de pesos en resultados netos interanuales.
Coordinación con el Gobierno Federal
La empresa detalla que su Estrategia Integral de Capitalización y Financiamiento se ejecuta junto con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y la Secretaría de Energía (SENER), mediante repos, recompras de bonos y aportaciones de capital del Gobierno Federal.
Mantente actualizado con las noticias de política energética más relevantes con Energía y Ecología.
Petróleo
Se desploma la producción de Pemex pese a avances puntuales

El mes cerró con un dato que enciende las alertas dentro y fuera del sector energético: se desploma la producción de Pemex justo cuando se esperaba una ligera recuperación. La refinación total de petróleo crudo y líquidos cayó a su nivel más bajo en cuatro meses, un retroceso que puso bajo la lupa el desempeño de las plantas del Sistema Nacional de Refinación. Sin embargo, dentro del panorama gris, dos complejos —Tula y Dos Bocas— lograron sostener parte del peso que arrastraba la estatal.
La caída se explicó principalmente por descensos en la mayoría de las refinerías, en especial Salamanca y Salina Cruz. Y en ambos casos, el talón de Aquiles se repitió: menor disponibilidad de crudo pesado y dificultades crecientes para procesarlo. Salamanca apenas mantuvo estable el suministro de crudo ligero; en Salina Cruz ocurrió algo similar con el reconvertido. Otras plantas —Cadereyta, Madero y Minatitlán— también cedieron terreno.
Tula y Dos Bocas: el pulso que aún sostiene al SNR
A contracorriente de la tendencia general, Tula y Dos Bocas avanzaron como pocas veces en el año. La refinería hidalguense procesó 248,319 barriles diarios en septiembre, su cifra más alta en 2025. El nuevo complejo en Tabasco no se quedó atrás, con 194,874 barriles diarios que la ubicaron como la segunda planta con mayor actividad.
Aun así, el rendimiento de Dos Bocas está muy lejos de su capacidad máxima. Según la consultora GMEC, la calidad del crudo que recibe —en especial el crudo pesado— limita el alcance real de la operación. Lo que se observa en los reportes oficiales contrasta con las metas que el propio gobierno federal ha reiterado desde la inauguración del proyecto.
Se desploma la producción de Pemex: el factor del crudo pesado
La tensión en el sistema es clara. De acuerdo con el analista Ramses Pech, gran parte del retroceso se debe al tipo de petróleo que se envía a las refinerías. México produce sobre todo crudo pesado, lo que acelera el desgaste de los equipos y obliga a paros cada vez más frecuentes. Esa misma característica está detrás de las dificultades para cumplir con la norma NOM-016-CRE-2016.
Incluso en Dos Bocas, ciertos lotes de gasolina y diésel no cumplen con los estándares y deben enviarse a otras plantas —como la Refinería de Salamanca— para ser reconfigurados. El diésel de bajo azufre es uno de los productos más afectados.
El estrés operativo se percibe en toda la red: contenido de azufre elevado, paros programados y no programados, y costos que se acumulan mientras la producción intenta sostenerse.
La carrera entre Tula y Dos Bocas
En el tablero general, Tula sigue siendo la refinería con mayor elaboración de petrolíferos, con 235,302 barriles diarios entre gasolinas, diésel, turbosina, combustóleo y otros productos. Dos Bocas ocupa el segundo lugar con un promedio de 192,459 barriles diarios.
El complejo Olmeca —que ha capturado buena parte de la atención pública— reporta una producción de 84,682 barriles diarios de gasolina. Aunque representa un avance respecto a sus primeros meses, sigue por debajo de Tula. La Secretaría de Energía (SENER) ha señalado que Dos Bocas ya opera a niveles cercanos a 270,000 barriles diarios, pero los informes técnicos no respaldan esta cifra.
De hecho, ningún complejo del país ha alcanzado ese nivel. La refinería Miguel Hidalgo, en Tula, continúa siendo la más cercana al objetivo, pero aún a distancia considerable.
Dudas hacia el futuro
El mes terminó con un mensaje ambivalente: se desploma la producción de Pemex mientras sus refinerías más nuevas y estratégicas todavía no alcanzan los niveles prometidos. El panorama deja más interrogantes que certezas sobre la capacidad real del sistema para absorber la producción futura y para mantener, sin interrupciones, la meta para la soberanía energética.
Mantente actualizado con las noticias más relevantes del sector energético con Energía y Ecología.
Petróleo
Se dispara la producción en Dos Bocas con 192 mil barriles diarios

La refinería Olmeca, conocida popularmente como Dos Bocas, superó por primera vez los 190 mil barriles diarios de producción en septiembre, consolidando un incremento de 87.52% respecto a agosto.
De acuerdo con Petróleos Mexicanos, este salto no sólo rompe la tendencia bajista de los meses previos, sino que posiciona a la planta tabasqueña en el centro de la estrategia de autosuficiencia energética impulsada por el actual gobierno.
Se dispara la producción en Dos Bocas, el mejor mes que ha tenido
El avance representa la utilización del 56.47% de la capacidad total de la refinería, que puede alcanzar hasta 340 mil barriles diarios. Es el primer gran salto operativo desde que inició su funcionamiento en junio de 2024, tras más de una década de planeación, debates técnicos y promesas de soberanía energética.
“El rendimiento de Dos Bocas demuestra que el sistema nacional de refinación puede fortalecerse con disciplina operativa y control técnico”, sostuvo Víctor Rodríguez Padilla, director general de Pemex, al comparecer ante la Cámara de Diputados a finales de octubre.
El funcionario aclaró que, aunque la capacidad instalada es de 340 mil barriles, el objetivo realista es llegar a 320 mil barriles diarios en los próximos meses.
Gasolinas y diésel impulsan el repunte
La mejora se explica principalmente por el aumento en la producción de gasolinas y diésel. En septiembre, Pemex reportó 84 mil barriles diarios de gasolinas, un crecimiento de 104.8% respecto al mes anterior.
De ellos, 67 mil barriles corresponden a gasolina Magna (UBA), mientras que 17 mil fueron Premium.
Por su parte, la producción de diésel alcanzó 80 mil barriles diarios, casi el doble de los 41 mil registrados en agosto.
En conjunto, la refinería Olmeca aportó 18.89% de toda la producción nacional de combustibles en septiembre, un salto que no pasará inadvertido en la política energética nacional.
La aportación de crudo y el reto de la capacidad total
Durante el mismo periodo, Dos Bocas procesó 194 mil barriles diarios de crudo, un incremento del 46.24% respecto al mes previo. Esto representa una quinta parte del procesamiento total de crudo de Pemex, que cerró septiembre con un promedio de 949 mil barriles diarios.
Aunque las cifras son alentadoras, especialistas del sector recuerdan que la refinería aún no opera a plena capacidad. De hecho, solo uno de sus dos trenes de refinación está activo, mientras que varios equipos permanecen en fase de pruebas.
Entre promesas y realidades técnicas
Inaugurada en julio de 2022, la refinería Olmeca ha sido emblema y controversia. Desde sus inicios, se le ha exigido demostrar que puede transformar el mapa energético del país sin replicar errores del pasado.
Sin embargo, su avance técnico no ha estado exento de ajustes: los productos secundarios, como turbosina o combustóleo, todavía no aparecen con regularidad en los reportes oficiales.
Consultoras como GMEC estiman que Dos Bocas alcanzará su operación formal completa hasta 2027, una vez que ambas líneas de refinación estén activas y el sistema de distribución opere de forma integral.
Según su último análisis, la curva de aprendizaje técnica será clave para determinar si la refinería puede sostener estos niveles de producción de manera continua.
El desafío de sostener el impulso
La expansión de Petróleos Mexicanos en el ámbito de refinación se interpreta también como una búsqueda por reducir la dependencia de importaciones. No obstante, los analistas advierten que mantener el ritmo actual requerirá un suministro estable de crudo ligero y un manejo cuidadoso de las emisiones y residuos del proceso.
En el horizonte, Dos Bocas se perfila como el proyecto que podría redefinir el equilibrio energético del país, aunque su consolidación todavía depende de precisión técnica y transparencia operativa.
Y mientras la refinería gana terreno, la expectativa ciudadana crece: que la promesa de autosuficiencia se traduzca en precios más estables y combustibles más limpios.
Mantente actualizado con las noticias más relevantes del sector energético con Energía y Ecología.
-
Energía6 mesesMéxico necesita 3 mil gasolineras más para cubrir demanda
-
Energía6 mesesGrupo Iconn adquiere operaciones de Shell Mobility en México
-
Energía6 mesesCrudo mexicano repunta tras decisión de OPEP+ y veto de EU a Chevron
-
Energía6 mesesASEA lanza nuevo esquema para simplificar trámites en sector energético
-
Energía6 mesesOPEP+ extiende recortes de producción petrolera hasta 2026
-
Energía6 mesesGasolinas seguirán sin estímulo fiscal en primera semana de junio
-
Energía6 mesesSin estímulo fiscal: gasolina y diésel se mantienen con IEPS completo por séptima semana
-
Energía6 mesesTrascienden nombramientos internos de Pemex por trabajos de reestructuración









